Epístolas Consejiles

Estimado presidente,

Acusamos recibo de tu carta del 13 de Septiembre. En el caso particular de algunos de quienes esto escribimos, acusamos recibo con mas alegría si cabe dado que nuestros Colegios están practicando el muy noble y muy Coreano (de donde el señor con el pelo cardado) arte del apagón informativo y no ha sido hasta después de recibir tu misiva que se han decidido a publicar en sus Webs el RD de visados (el 15 de Septiembre en algunos casos). Viva el siglo XXI.

A la llegada de tus atentas letras nos encontramos bien de salud. Trabajando el triple para cobrar un tercio como bien sabrás. Pero como no es el objetivo de esta misiva contarte con pelos y señales lo bien que nos va, pasamos a puntualizarte algunos temas.

Respecto a la pervivencia de nuestro titulo tal y como lo conocimos, el de Arquitecto, tenemos que agradecer los esfuerzos al CSCAE a CREARQ y a todos los compañeros que de una manera u otra han dado el callo en este asunto. Sin embargo, no podemos dejar de llamar la atención sobre una serie de hechos evidentes:

Seguimos en manos del ministerio, a expensas de que cualquier indocumentado decida tener un ataque de iluminación, como ya ocurrió cuando el señor Sagarra i Trias saco los pies del tiesto común, permitiéndose incluso opinar sobre el titulo que tendríamos que tener quienes ya ejercemos esta profesión. La solución graduado en arquitectura no contenta a nadie aunque reconocemos que es mejor que como empezamos.

Y es ahí, en como empezamos, donde deberías como presidente hacer un profundo análisis. Hemos llegado a un punto próximo a lo que queríamos y cualquiera con dos dedos de frente considera racional. Nos ha costado manifestaciones, reuniones, protestas, disensiones internas, peleas y actuaciones institucionales que lamentamos decir han estado en las antípodas de la transparencia y la eficacia y que a día de hoy aun no sabemos a quien querían beneficiar (Desde luego a la profesión no). Afortunadamente parece que esos tiempos quedaron atrás pero insistimos:

¿Por qué lo que para otros es casi inmediato ha costado a los arquitectos esta travesía del desierto?

¿Por qué los ingenieros son Master 360 créditos prácticamente a origen y nosotros nos quedamos (Tras una pelea que dejaría al enfrentamiento entre Chuck Norris y Mr T en pañales) en graduado en Arquitectura 300 créditos, pendientes de volver al ring con el ministerio?

Te recomendamos que analices la situación sin apasionamientos inútiles. Ellos siempre ganan, y cuando digo ellos me refiero a los ICCP a los Arquitectos técnicos….Nosotros siempre perdemos. No, ya sabemos que esto no es un guerra (O al menos que no lo es de forma declarada) pero se nos hace incomprensible que una profesión con el numero de colegiados (Y no colegiados) que tenemos se encuentre en esta desventaja eterna y endémica.

Quizá tenga que ver en ello nuestra muy precaria organización. Precaria, querido presidente, lees bien. Divide y vencerás decía Julio Cesar, Aquél cuyas filas estén unidas en un propósito, saldrá victorioso, decía Sun-Tzu. En nuestro caso, cumplimos perfectamente lo primero, y para nada lo segundo.

Somos, como bien sabes, una organización multicentrica, llena de jefes tomando decisiones y con los pobres indios enterándose tarde mal y nunca. No es baladí el hecho de que los ICCP sean un único Colegio y es algo que deberíamos considerar cuando se trata de entender que en pleno siglo XXI la atomización cuasi aldeana de nuestras instituciones genera una cabeza (Unos generales) enorme, entretenida en cuestiones que no deberían ocupar su tiempo cuando de salvaguardar la profesión se trata.

El caso Andaluz es paradigmatico, querido presidente. Ocho Colegios. OCHO.

No se si la distribución es la misma que la de los anillos de Tolkien, pero lo que si se es que como en el famoso libro los ocho están de tanto en tanto entretenidos en luchas intestinas y en repartirse el anillo único del poder que representa el Consejo Andaluz, que ni pincha ni corta pero ayuda a su señor (Quien le vote) porque se da la circunstancia de que es quien se sienta en el Consejo Superior. Todo muy poco democrático y muy poco lógico.

Te repetimos que estamos en el Siglo XXI y que, volviendo a Sun-Tzu, dirigir a muchas personas es como dirigir a unas pocas: Cuestión de organización.

Como bien sabes hay Colegios haciendo ERES, otros pidiendo derramas, algunos que llevan (sobre los hombros de los colegiados) unas deudas hipotecarias inaceptables. Hay colegios provinciales, territoriales, comunitarios, bicomunitarios, delegaciones, demarcaciones y toda una suerte de variantes en una organización que es más el ejército de Pancho Villa que una maquinaria bien engrasada. Las partes podrán funcionar, pero el todo, querido compañero, esta claro que tiene problemas. Y gordos.

Esta pequeña recomendación sobre nuestra organización nos lleva a otra cuestión: El RD de Visados.

Dices en tu misiva que el Visado es una garantía contra el intrusismo y una garantía sobre la suficiencia de los documentos técnicos elaborados por los colegiados.

Querido presidente, que en pleno siglo XXI la mejor garantía contra el intrusismo sea un sello (De caucho o en PDF) es como poco preocupante. Existen, de ello estamos seguros, cientos de formas diferentes para protegernos contra el intrusismo que no tienen nada que ver con el sistema actual de visados que responde a otros principios que no son validos en su mayoría en la época en que vivimos.

Respecto a la garantía técnica, permite que te recuerde que en muchos casos el visado es estatutario, que no todos los colegios visan igual (Esta es otra), que la comprobación documental no es garantía de calidad sino simplemente de que las piezas están todas y que la garantía de calidad la debe ofrecer el Colegiado y no el Colegio.

Resulta como poco surrealista que la garantía de calidad se le ofrezca a la sociedad SOBRE NUESTRAS MUY MERMADAS CUENTAS CORRIENTES, en un momento en el que estamos colgando el cartel de “Vuelva usted mañana”, las cuotas de visado alcanzan precios desconocidos con incrementos en algunos casos del 75%.

Se remite tu carta a una posible sustitución del trámite de control de proyectos para otorgamiento de licencia por el de visado. Peligrosa afirmación esta que creemos hecha muy a la ligera, querido presidente. No son los Colegios quienes deben llevarla a cabo. Ni esta entre sus atribuciones ni es lógico exponer a los Colegiados (Recordemos, obligatorios) a una posible demanda por un error en un informe para solicitud de licencia. No hablaremos de lo que implica el hecho de trasladar la responsabilidad de firmar esos informes a los compañeros de visado en términos que, por lo luctuoso, preferimos omitir en esta carta.

Si te diremos, presidente, que no es de recibo que se haya acudido a la prensa con el ritmo plañidera aduciendo que la perdida del visado generaría inseguridad (Técnica, nada menos) para la sociedad. Traducido a lo que se ha entendido, lo que habéis dicho (Y esto es intolerable) es que los arquitectos españoles con su titulo en vigor necesitan de la intervención paternalista del colegio que garantice que las cosas no se van a caer. En buen lugar nos dejáis, querido compañero, no solo ante una sociedad que ya de por si desconfía de nosotros (Este tema merecería una carta aparte) sino ante otro enemigo mucho mas peligroso: Nuestros queridísimos seguros de responsabilidad civil que con vuestras declaraciones institucionales como pretexto ya están rumiando deliciosas subidas de primas que a buen seguro harán de este un año ajustadísimo.

Seamos francos, lo que mas duele del visado es su carácter recaudatorio. Es lo que mantiene esta estructura institucional sobredimensionada a todas luces.

Y si bien es cierto que el decreto deja las cosas aproximadamente como estaban respecto a que documentos se visan, no lo es menos que ahora cualquier colegiado podrá visar en su lugar de origen. Te vaticinamos que un altísimo porcentaje de COAs están abocados a la extinción en este sistema parcelario y reduccionista. ¿Qué ocurrirá entonces? ¿Lo habéis estudiado?

El problema, querido presidente, es que estamos hace años poniendo parches a un barco que se nos hunde. Que en vez de abrir el debate a una profesión que como pocas ha sabido adaptarse a múltiples cambios, este se ha mantenido cautivo de un sostenella y no enmendalla de difícil supervivencia. En la tienda de la esquina venden impresoras laser, pero nosotros queremos seguir usando nuestra vieja imprenta Gutemmberg…. Y que sea rentable.

Los cambios deben liderarse, presidente, y la revolución no es que este llamando a las puertas, es que ya llevamos en ella unos años. No puede ocultarse la precariedad laboral de los compañeros en una profesión en la que a día de hoy la opción de trabajar para un tercero no puede ejercerse dentro de la legalidad en prácticamente ningún sitio. No puede pasarse por alto que el visado como sistema recaudatorio va a dejar de funcionar como lo venia haciendo. No podemos, ninguno, obviar que la estructura institucional de los COAs esta llegando a un colapso desorganizado y cataclismico. Es el momento de abrir el debate. Es el momento de ser atrevidos, de no callarse nada, de no dar nada por supuesto y de desprenderse de viejos fetiches y antiguas manías. ¿Debemos ser un unico Colegio? ¿Debe cobrarse la colegiación haciéndola voluntaria? ¿Debe el Colegio ser un ente de servicios de primer orden pagados de forma directa? ¿Qué ocurre con las cosas que “No se visan”? ¿Y con los colegiados que no responden ya a la estructura profesional de “Estudio y visado”? Es el momento de responder entre todos a estas preguntas y a muchas más.

El futuro esta abierto y lo que se aventura de el, no es nada esperanzador si seguimos anclados en un pasado que muchos no creemos que pueda volver. Aprende de tus colegiados, presidente, han sido capaces de sobrevivir, de adaptarse y de actualizarse a un ritmo endiablado. De la institución que presides no debería esperarse menos.

Lea aqui la carta orginal del CSCAE 20100916_Carta Pte_CSCAE_a_Colegiados